jueves, diciembre 30, 2010

Dos mil uans.


Llega ese momento tan enojoso, el de plantearse deseos para el nuevo año. Un deseo obvio es el seguir con estos blogs (con mayor o menor número de entradas, eso dependerá). Si hablamos de deseos como quien habla de pilares básicos, por así decirlo, tengo dos claros. El primero, y recurrente, es el de la carrera, y el segundo tiene que ver con ella pues, a medida que la termino, quiero iniciar un proceso de cierta independencia, puedo aprovechar que en León eso es más asumible que en Madrid. Son deseos realistas, lo cual no quiere decir que sean fáciles. Faltaría un tercer deseo, no tan claro, que no expondré porque necesitaría muchas líneas para que no resultara ridículo. Me lo guardo en la recámara...
¡Queda justo un día para el nuevo año! Deseo, valga la redundancia, que vuestros deseos se cumplan (si vais a dejar de fumar, os van a ayudar un poquito). Yo no tengo mucho más que decir por ahora, no voy a caer en el absurdo de querer condensar ahora todo el transcurso del año. Dejemos la retaguardia y miremos hacia adelante. Y, como para casi todo en esta vida, se puede recurrir a Hitchcock en este caso cantando: Qué será, será...

FELIZ AÑO DOS MIL UANS. QUE EL GOBERNADOR DE LIBIA NOS AMPARE.
Y, SOBRE TODO (COMO PUEDE DEDUCIRSE DE LA FOTO DE ARRIBA), CHAMPAGNE FOR EVERYONE.

viernes, diciembre 24, 2010

¡Felices Fiestas!

Al final he cumplido mi amenaza, si es que se puede llamar así, de rebajar el número de entradas este año. Confío en que haya sido por la carrera y no por pasotismo o falta de inspiración, en todo caso no me he olvidado en ningún momento de este blog ni de la novela que estaba albergando, a la que pretendo regresar cuando, a partir de febrero, el número de asignaturas se reduzca y las clases vespertinas desaparezcan.
Todavía tengo que visitar los cada vez más numerosos establecimientos de chinos para comprar algunos regalos surreales de cara a esta Nochebuena, que no falte sentido del humor aunque me temo que el ingenio se ha quedado seco para el Concursito, como sea que he terminado las clases hace un par de días y hasta entonces he tenido que estar pendiente de las tareas. Por cierto, a través de mi hermano Paconcio me acaban de llegar dos ejemplares de mis libros adquiridos a través de la web Amazon e imprimidos directamente en los Estados Unidos. En concreto, ponen: Made in the USA. Lexington, KY. ¡Toma ya! ¡Mis primeros libros Made in USA! ¡Y de Kentucky, como los pollos! No me preguntéis cómo es posible que hayan llegado tan lejos, ni si alguien está ganando pasta a mis expensas; aún no he podido averiguarlo, de todos modos me hace mucha ilusión esa mera etiqueta. Por eso, y por muchas cosas más, ¡champagne for everyone esta noche! Paz, amor e igualdad. Felices Fiestas.

PD- No se por qué pero ni en este blog ni en el otro puedo aumentar el tamaño de la letra. Se puede entender que este, con más de cuatro años, ya esté empezando a envejecer, pero el otro es joven aún... Ja, ja.