De entrada, he de reconocer que este mes tengo muy pocas clases. Aprovechando que el otro día nos pusieron un capítulo de Los Simpson, puedo decir que abril tiene un poco el espíritu de Homer. Antes de que os cabreéis por semejante demostración de pereza, he de advertir que mayo nos recibirá con uno de los peores exámenes del año, y por otro lado sigo con mis Abrasadores, gracias a Libia.
Esta semana las vacaciones las dieron por las fiestas de la facultad, Filosofía y Letras. No se quién será el patrón, bienhallado sea en todo caso. El jueves salimos juntos filólogos e historiadores, y vaya nochecita, bien dicho está. Ahora que estoy leyendo la doctrina de Buda, creo que no he tenido a bien seguir el camino del medio: bueno, en cierto modo la otra noche sí, porque íbamos por el medio de la carretera, ya que no había ni coches ni humanos. Vaya metáfora. A ver si salimos más, chicos, que lo pasamos muy bien. (Y me abstendré de explicar el juego de los gestos)
Pero sí, por san Homer, que he estado algo vago, esta semana he escrito poco en el blog, y teniendo en cuenta que la última vez también hablé sobre juerga, os pensaréis que estoy todo el día así. Je,je. No. Lo justo y, sobre todo, bien aprovechado. Que siga así.
No hay comentarios:
Publicar un comentario