viernes, febrero 22, 2019

Rechazo (II).

Puede ser el número dos respecto a los episodios de rechazo este año, pero no el último. Ahora bien, no quiero que pueda parecer que el comienzo de 2019 se ha caracterizado tan solo por este sentimiento. Esta misma semana, también he gozado de lo opuesto al rechazo, y he gozado lo mío. Mi cuerpo sí fue mi gozo, volviendo a la sempiterna novela de Gimeno. Por otra parte, los rechazos asociados al doctorado fueron de entidad menor: una reseña enviada en julio, nada menos, sobre la que me mandaron la típica contestación de que no se ajusta a los parámetros de la revista, que si tengo que leer la sección About o no se qué leches. Bueno, si la revista se llama Masculinidades y mi reseña era de un libro sobre prostitución masculina, supongo que algo tendrá que ver con la masculinidad, ¿nop? Y, si me rechazan la entrevista a la propia Gimeno, es indiferente, porque esta me va a servir en mucho para el aparato crítico de mi análisis, además de constituirse en apéndice del trabajo.
Hoy es un día de reminiscencias nostálgicas, un día para afirmar la lucha y seguir adelante. Cuando existen personas que, consciente o inconscientemente, pretender establecer boicots a mi proyecto, yo digo que por ahí no paso. Después de cuatro años de trabajo, que se coman su intento de boicot con patatas, porque yo tengo a quien imitar en los ejemplos de luchas, yo no me rajo y voy con esto hasta el final. He dicho. 

No hay comentarios: