jueves, marzo 12, 2009

Fin de semana cazurro.


Repito: ¡Fin de semana cazurro! Parece la rutina, ¿no? Qué va, ahora mismo es una novedad. Llevo un mes pasando los fines de semana fuera de León, entre Zaragoza, Estocolmo y Madrid. Tres destinos que, en diferente modo, me han marcado hasta tal punto que ahora me parece estar al comienzo de un nuevo ciclo. Sí, en serio; quizá exagere, puesto que esta semana está siendo un poco rara, pero así lo creo. Por ello, es hora de iniciar nuevos experimentos y desechar otros que han demostrado ser inútiles o, aún, poco maduros.

Cambia el clima, también, y por ello creo que es hora de que me corte el pelo al menos parcialmente. También me gustaría, a sugerencia de mi amigo y compañero Santi, hacer un poco de ejercicio para contrarrestar los indicios de fofez que pueden ir a mayores. Le puedo proponer que me acompañe, aunque al hacer footing cuesta seguir mi ritmo de tortuga reumática (aunque en la Wii no me fue nada mal...) Es tiempo de sorprenderse a uno mismo: he comenzado a leer El origen de las especies, libro que cuando lo compré hace una década no lo quería ni para pisapapeles. También, gracias a la asignatura de Tradición Clásica, que contiene una revisión de las sagas épicas griegas y romanas, creo que ya se cuál es la aportación que quiero dar este año a mi propia saga de los Abrasadores: hay dos planos en la misma; uno en el futuro, que es donde salgo yo con mis primitos, y otro en el pasado que es más rollo épica tradicional. Me gustaría desarrollar este último, tomar notas en plan genealogía, que es donde más pudiera dar rienda suelta a mis influencias tolkenianas y, remontando el tiempo, también de la Antigüedad clásica. Es decir, no me pondría a escribir el segundo libro, pero sí haría copias del primero para pasarlo a alguno de vosotros y que lo leáis, y de paso echarle un ojo yo también.

Esta última idea es más de verano que de primavera, desde luego... Ja, ja. Porque lo que es esta semana, habrá que seguir dando caña a la carrera. Y disfrutar un poco de esta pequeña y mediana ciudad, claro, de la cual no me he olvidado.

No hay comentarios: