martes, marzo 17, 2009

La foto viene al pelo.


He aquí un auténtico lince, en su hábitat de Skansen. Supongo que en Suecia estarán protegidos, como en España. El término lince se puede aplicar también de forma metafórica a una persona avispada; sospecho que no es el caso de quien haya asesorado a los obispos en su campaña contra el aborto. Y deduzco que no pertenecía a Greenpeace ni a Ecologistas en Acción...

Y desconozco, aunque me gustaría saberlo, de dónde ha salido el dinero para pagar esa peculiar campaña. En el fondo, yo creo que todo es un problema de educación. Den una educación afectivo-sexual más eficiente (al menos mejor que la que recibí yo) y el problema se irá solucionando, no solo ese sino también la transmisión del VIH y otras ITS. Yo no se qué campaña es más boba, si esta o la del rap del condón. La balanza está equilibrada... Me gustaría saber qué opinarían los linces si pudieran hablar. Quizá que el peligro de extinción en que se encuentran podría solucionarse con la extinción de la propia raza humana. En todo caso, seguiré leyendo a Darwin, que de esto sabía bastante.

No hay comentarios: