sábado, julio 12, 2008

PETER JACKSON (II)


Criaturas celestiales supuso un cambio de género como quien cambia de la noche al día. Basada en un hecho real, es un drama con ciertos elementos oníricos, trata sobre la relación entre dos jovencitas en la Nueva Zelanda de hace no se cuánto tiempo, marcada por un trágico final. La cinta, de leve trasfondo lésbico, supuso el despegue de la carrera de Kate Winslet. Y no solo eso. También a su director le abrió las puertas de Hollywood, para volver al tipo de película que le había dado a conocer.
Aunque no exactamente el mismo, desde luego. No recuerdo mucho de su debut americano, aquí se tradujo con el lamentable título de Agárrame esos fantasmas, como si la protagonizara Leslie Nielsen. Y desde luego que el filme era de humor, pero bastante más estilizado que sus películas gore. Esta era más bien una versión para adolescentes de sus éxitos de serie B, con fantasmas y humor negro pero sin mucha sangre ni vísceras. Para remarcar el lado teen, se escogió a Michael J. Fox, en uno de sus últimos papeles antes de que desgraciadamente el parkinson hiciera mella en él. Pero también hay guiños a los amantes del terror, dado que aparece Jeffrey Combs, el doctor loco de Re-Animator. Sin duda Peter Jackson tendría ganas de contar con él, ya que dijo que sin Re-Animator no existiría Brain Dead, y la verdad es que las referencias entre una y otra son notables.
En fin. Que no puedo hablar mucho de esa cinta porque la tengo lejana, así que reservémonos para lo que conoce todo Cristo. ¿Lo habéis adivinado? Ja, ja. Sí, la trilogía que me acompañó durante toda mi carrera (¡carrera!) de Cinematografía. La verdad, no se cómo los de New Line Cinema aceptaron semejante chaladura, pero quien arriesga gana, en ocasiones: rodar tres películas a la vez, sobre un libro a mi juicio muy complejo de adaptar, en Nueva Zelanda, con actores desconocidos, bajo la batuta de un director famoso por filmes gore… Pues la recompensa fue un porrón de dinero semejante al oro de Smaug, y la resaca de los Óscar incluida. Amén de una megalomanía galopante sobre la que luego analizaremos las consecuencias.
Yo soy fan de Tolkien, sí, aunque no alcanzo ni el cinturón naranja de frikismo. Le admiro por muchas razones que no voy a desarrollar aquí. Es imposible adaptar sus libros tratando de contentar a todos. ¿Por qué siempre capan los pasajes más poéticos de su obra? Está claro. Porque la mayor parte del público bostezaría, si bien a algunos lectores como a mí nos interesaría verlos plasmados, en manos de un director con la suficiente sensibilidad, qué duda cabe. Pero impera la estética de videojuego más bien, las batallas interminables de CGI a tope, elfos haciendo surf, olifantes y miles de bichos más. Vamos, que para mí, la de Peter Jackson no es la adaptación definitiva.

1 comentario:

Hopewell dijo...

Yo de Ptere Jackson he visto algunas y otras no. He visto "tu madre se ha comido a mi perro", que me pareció basuresca. No he visto Bad Taste. He visto Agarrame esos fantasmas, que a riesgo de que ma apaleen por la calle, me parece su mejor película. No he visto Criaturas celestiales. Y por supueso, he visto El señor de los Anillos, que me entretuvo, gustándome más algunas que otras, encantándome los momentos épicos y batallescos, odiando esas escenas que parecían puestas para agradar a los niños a lo Jar Jar Binks, o sea, sin venir a cuento. Recuerdo especialmente a Orlando Caradepalo Bloom surfeando sobre su escudo en medio de una batalla. Algo que me dio bastantes más ganas de vomitar que la escena más gore de Tu madre se ha comido a mi perro.
En fin, que desaguisado...